Dedicada al fortalecimiento de los cultivos, a lo cual llamamos “resistencia sistémica adquirida” (RAS), ya que actúa de modo directo en proteger nuestra inversión, disminuyendo la carga química tradicional con la que se producen los cultivos, en línea con las nuevas tendencias de producción de bajo impacto ambiental.
¿Por qué es importante?
Cada vez es más relevante el uso racional de productos de alta toxicidad o que tengan problemas de residuos en un fruto final. El manejo productos que argumenten un efecto de “RAS” no solo representa un ahorro en la cantidad de pesticidas a utilizar, sino que disminuye el contenido químico con lo que producimos tradicionalmente un cultivo.
¿Cuándo se usa?
Situaciones donde busquemos disminuir la carga química en un cultivo, ya sea en aplicaciones con efectos de cierta fitotoxicidad o bien que se necesite cumplir con cierto rango de tolerancia.
La resistencia sistémica adquirida tiene mayor absorción en cultivos biorracionales o preocupados por su impacto ambiental y fitotóxico.
¿Qué resultados se pueden esperar?
Una planta con mayor resistencia al ataque y proliferación de plagas y enfermedades.